La Carrera Tajamar–Torreciudad es mucho más que una prueba deportiva. Es un camino de fe, esfuerzo y comunidad que une a colegios, familias y antiguos alumnos en una tradición que ya cumple 28 años. Como ya es tradición, varios colegios de la Red Arenales, participan en ella. 

La carrera: 500 km de esfuerzo y fe

Del 25 al 27 de septiembre se celebró la 28ª edición de la Carrera Tajamar–Torreciudad, un recorrido único de 500 km por relevos que une Madrid con el Santuario de Torreciudad (Huesca). Considerada la carrera más larga de Europa en su modalidad, esta cita reúne cada año a alumnos, familias, profesores, atletas y el ejército de tierra en un desafío que va más allá del deporte: busca fomentar la fe, el compañerismo y la unidad.

Así lo contaban desde Radio Marca abriendo el informativo de ese día cubriendo el inicio de la carrera: 

La prueba se organiza en 53 etapas de unos 10 km cada una, y se desarrolla sin parar hasta llegar al santuario de la Virgen de Torreciudad. En esta edición han participado cerca de 1.500 corredores, entre ellos numerosos alumnos de Primaria y Secundaria de los colegios de la Red.

El testigo, que pasa de mano en mano durante todo el recorrido, se convirtió en símbolo de confianza y motivación. Como repetían los corredores:

“¡Adelante, sin miedo! ¡No miréis atrás!”

La experiencia de los colegios de la Red que han participado   

Los centros de la Red compartieron en redes sociales su experiencia, reflejando la emoción vivida:

• Colegio Maria Teresa:

“Hoy no solo corrimos… ofrecimos cada paso, cada esfuerzo y cada sonrisa en el relevo de la Carrera Tajamar–Torreciudad, como inicio de este nuevo curso, a los pies de la Virgen de Torreciudad.”

 

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• Colegio Arenales Carabanchel:

“Un año más, nuestros alumnos de Primaria participaron en la carrera de los 500 kms de Tajamar. El primer relevo fue con nuestro colegio». 

 

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• Santa Mónica:

Lo define como «una gran experiencia».

 

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• Colegio Santo Ángel:

“Un año más, participamos en la carrera 500 kilómetros solidarios Tajamar – Torreciudad. Porque el deporte une, educa y hace familia.”

 

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Estas voces reflejan lo que se vivió: una experiencia de amistad, fe y superación que une a toda la Red Arenales y tantos otros colegios y amigos en un mismo propósito. Así lo narran desde el colegio Arenales Carabanchel, que califican la experiencia vivida como una “Peregrinación deportiva”.

El deporte hace familia: una carrera que acompaña toda la vida

La Carrera Tajamar–Torreciudad no es solo un evento deportivo: es una experiencia que acompaña a quienes la viven, dejando huella en sus recuerdos y en su forma de entender el esfuerzo compartido. Así lo cuenta Javier Molina, antiguo alumno de Tajamar, que hoy trabaja en la Red Educativa Arenales y que lleva más de diez años participando en la prueba.

Su historia refleja cómo esta carrera se convierte en tradición y en escuela de vida:

• Como alumno, empezó corriendo junto a las familias del colegio, con ilusión y alegría.
• Como atleta, participó en el equipo de atletismo de Tajamar, compartiendo recorrido con corredores que llegaban desde distintos puntos de España e incluso de otros países. Esta experiencia le encantaba, porque le recordaba al Camino de Santiago, donde uno se encuentra con peregrinos desconocidos, conversa con ellos en el trayecto y, aún sin conocerse, se siente unido por un mismo destino.
  Hoy, ya como profesional en Arenales, sigue corriendo en los tramos nocturnos junto a familias y antiguos alumnos de Tajamar, con la misma pasión de siempre.

Durante todos estos años, recuerda que le ha pasado de todo: lluvia, granizo, frío y calor, pero siempre con la certeza de que la carrera nunca se detiene. “Es muy bonito y emocionante, porque el tiempo no impide que se celebre la carrera. Nunca se para por nada”, asegura.

Su testimonio es reflejo de cómo “el deporte hace familia” y de cómo la Carrera Tajamar–Torreciudad no se queda en una anécdota deportiva, sino que se convierte en un camino de fe, amistad, encuentro y unidad.

La meta: Torreciudad

La llegada al Santuario de Torreciudad es siempre el momento más esperado. Tras tres días de relevos, el esfuerzo de cada etapa cobra sentido al ponerlo a los pies de la Virgen, patrona de la carrera.

✨ La participación de los colegios Arenales en la Carrera de los 500 km es un recordatorio de que el deporte educa, une y abre caminos de fe. Cada kilómetro recorrido se convirtió en un paso más en la tarea educativa que enseña a vivir con ilusión, entrega y confianza.

👉 Para más información sobre la carrera puedes visitar la cuenta de Instagram del Club Deportivo Tajamar.

Arenales sigue apostando por la innovación en comunicación educativa participando en el primer EduFocus de Marketing y Comunicación organizado por CECE Madrid.

Durante el encuentro, celebrado en el colegio Tajamar, se ha tenido la oportunidad de asistir a dos sesiones inspiradoras. Rafa Martín Aguado, consultor en Rommel & Montgomery  ha ofrecido claves sobre la comunicación corporativa en el entorno educativo. Ha comenzado la sesión abordando la importancia de los públicos internos, explicando que van a «hablar y queremos que hablen». Las instituciones deben trabajar en mejorar su credibilidad y aprender a dar reporte de lo que están haciendo. Por ejemplo, compartir los resultados de las encuestas que se les envían a las familias (incluso con aquellos padres que no han respondido), y transmitirles las medidas adoptadas a partir de los resultados.

También destacó el rol del comunicador, que debe dejar de ser reconocido como «un robador de tiempo» para convertirse en un «solucionador de problemas» para nuestros públicos. Por último, enfatizó que los comunicadores deben ser guardianes de la marca y embellecedores de la identidad. 

En la segunda parte del evento Ignacio Vallejo-Nágera, de Micole, ha compartido estrategias innovadoras para potenciar el marketing educativo. Resaltó la importancia de enfocar el marketing a una experiencia de cliente positiva, especialmente en el contexto de las admisiones escolares, donde la inteligencia artificial está jugando un papel clave en los equipos de gestión de los colegios.

Según Ignacio, «el ratio de alumnos por colegio ha caído un 13%», lo que refleja el desafío actual de atraer y retener alumnos. Además, mencionó que los padres millenials, una generación abrumada por la información, requieren un enfoque diferente para llegar a ellos de manera eficaz.